Cultivo de Choclo en la Huerta

Se siembra para el aprovechamiento de la espiga a la madurez lechosa, conociéndose con el nombre de "choclo".

choclo

Clima y suelo para cultivar

Sensible a las heladas, es un cultivo de clima templado-cálido, tampoco tolera exposiciones prolongadas a bajas temperaturas. La temperatura óptima del cultivo es entre 15o y 24o C con una máxima de 32o C y mínima de 10o C. Prefiere los suelos franco a franco-arcillosos por retener más la humedad, aunque se puede cultivar en una amplia gama de suelos salvo los que tengan problemas de salinidad o acidez. Responde muy bien a un suelo de elevada fertilidad por lo cual se aconseja que el maíz continúe en la rotación a la arveja o haba, debido al aporte de nitrógeno por simbiosis que dejan estos cultivos.

Forma y época de siembra

Desde Septiembre a Noviembre, según la variedad, evitando las siembras tardías ya que pueden ser muy perjudiciales por ataque de isoca de la espiga. Se siembra en forma directa a golpe, en chacra a 1,40 x 1,40 m o en surcos a 70 cm entre surcos y 30 cm entre plantas. Se recomienda realizar siembras escalonadas cada 15-20 días para prolongar el período de cosecha hasta Marzo - Abril.

Se calcula unos 10 grs. cada 10 m lineales de surco para los de ciclo largo o 5 plantas por metro; y unos 15-20 gramos de semilla cada 10 m lineales de surco en cultivos ciclo corto.

Cuidados del cultivo

Aporcar cuando el cultivo tienen 50 cm de altura arrimando tierra al costado de las plantas para lograr un buen afianzamiento y evitar vuelcos por el viento durante su desarrollo. Se recomienda abonar con compost a razón de 1 Kg cada 1,5 metros lineal de surco y repetir nuevamente en el ciclo, cuando el maíz está en estado de macollaje. Recordemos que casi el 70% de los nutrientes que extrae el maíz en todo su ciclo ocurre desde 10 días antes hasta 30 días después de la aparición de la panoja.

Riegos: como es una planta que requiere humedad para obtener buen desarrollo y producir choclos de buen tamaño, debe tener buena humedad en su época crítica que es entre formación de las barbas y el final de llenado de los granos. Igualmente la falta de agua en el resto del ciclo resiente la obtención de buenos rindes.

Se estima que el maíz precisa, en suelos franco-arcillosos, unos 25 mm de agua por semana en la época de crecimiento y unos 40 mm por semana durante la formación de la espiga.

Las plagas más importantes para el maíz son las orugas cortadoras, que lo afectan en su crecimiento inicial. Para su control puede revisarse el lote a utilizar de noche, con cebos a base de cáscara de naranja. Si aparecen las orugas puede aplicarse piretrinas naturales o tierra de diatomeas en horas de la noche.

Otras plagas son las orugas y gusanos perforadores como la "isoca de la espiga", que atacan el extremo de la espiga, de difícil control por medios orgánicos, por lo que se recomiendan intercultivos con chaucha de enrame, sembrando en forma temprana los maíces más azucarados y en siembras mas tardías los maíces dentados (que son menos apetecibles por las orugas y tienen chala más fuerte y áspera, sobresaliendo de la espiga y dando mayor protección al ingreso de la oruga; en caso que esta penetre, queda en la punta, siendo menor el daño por el tamaño de espiga mayor que uno del tipo dulce). Realizar carpidas frecuentes para eliminar malezas y mantener el suelo suelto y aireado.

Cosecha

Se calcula entre 70 y 120 días según la variedad y época de siembra. Como dato orientativo la cosecha puede comenzar de 15 a 20 días después de la aparición de las barbas (estigmas) que comienzan a secarse, estando los granos al estado lechoso al hincarse la uña revientan fácilmente largando un líquido blanquecino


La fuente de este artículo es el “Manual para la Huerta Organica Familiar” del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) de Argentina. Por lo que las fechas de siembra y/o cosechas aquí mencionadas son válidas para esa región del hemisferio sur debiendo adaptarse para cada país en particular según el clima de cada zona y las estaciones del año.